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La infoxicación: ¿podemos ser nuestros propios curadores?

infoxicación

Por Zandra Fernandez Soto

Infoxicación: palabra que se atribuye a la sobrecarga informativa o la incapacidad de asimilar
correctamente altas cantidades de información.

Tenemos acceso a una cantidad de información inmensa. Nunca antes habíamos podido aprender
por nuestra cuenta sobre tantos temas. Algunos denominan esta era como la “era de la
información o del conocimiento”. Vivimos una auténtica revolución digital.
Sin embargo, nuestra capacidad de asimilar información no ha variado. De alguna manera estamos
siempre conectados a tabletas, celulares y otros dispositivos que nos transmiten información sin
parar, aunque en muchas ocasiones ignoremos la fuente o la veracidad de la información que
recibimos.

Una vez que recibimos con agrado información de una tendencia u opinión, los algoritmos hacen
todo lo posible por mostrarnos más información similar, y así nos perdemos en un mar de datos,
matrices y supuestos hechos que nos hacen pensar que es verdadero todo lo que recibimos.

¿Por qué no nos infoxicábamos antes de Internet?

Antes de que tuviéramos acceso a la Internet y a las redes sociales, recibíamos información a
través de los grandes y conocidos medios de comunicación (TV, radio, periódicos). Los grandes
medios decidían cuáles eran las noticias importantes y cuál era la relevancia de cada una.

Por supuesto, esto se prestaba a que en ocasiones manejaran la información para su propio
beneficio o para el beneficio de alguno de sus aliados. Sin embargo, la cantidad de información
que un individuo recibía era poca y en momentos muy precisos. No pasábamos el día entero
conectados recibiendo información de conflictos “en tiempo real” sobre los que no tenemos
mayor influencia.

Aunque este sistema de transmisión de información tenía sus errores, nos libraba de recibir
información completamente falsa como la que podemos recibir hoy día a través de Internet. Esto
sucedía porque había editores, que actuaban como una suerte de “curadores” de la información.
Además, como detrás de esa información estaba el nombre de un responsable que debía
responder por lo que escribía o transmitía, se trataban los contenidos con mucho más cuidado.

Hoy en día tenemos el fenómeno de las “fake news”, noticias falsas que ruedan sin que nadie
aparezca como responsable, se viralizan a través de miles de cuentas que tampoco tienen un
responsable visible detrás y el resultado es que la gente recibe un contenido que ni siquiera sabe a
quién pretende beneficiar con su difusión. Y lo más grave, un contenido falso que no tiene un
responsable detrás a quien castigar por su engaño.

¿Estamos preparados para ser nuestros propios editores?

En la mayoría de los casos, los usuarios de Internet no tienen manera de verificar si la información
que reciben es cierta o no. Tampoco pueden saber si los portales o cuentas a través de las que
consumen contenidos tiene una tendencia política o no.

Por lo tanto, un lector común con poca habilidad para verificar la información podría verse
desbordado a la hora de querer enterarse de algo. Además, la cantidad de temas podría ser tan
extenso, que le llevaría demasiado tiempo tener claridad sobre la veracidad de cada uno. Todo
esto lo llevaría a saturarse de información, y caer sin remedio en la infoxicación.

Consecuencias de la infoxicación

  • Angustia, stress y ansiedad ante la incapacidad de asimilar altos volúmenes de
    información
  • Baja capacidad de comprensión
  • Escasa credibilidad en lo que se lee, llega un momento que se duda de todo contenido
  • Necesidad de estar conectado todo el tiempo por FOMO (Fear of Missing Out) o el
    “miedo a perderse algo”

¿Cómo combatir la infoxicación?

  • Selecciona tus fuentes de información
  • Filtra el contenido y los temas que recibes
  • Limita el tiempo que estás conectado
  • Contrasta la información con sentido crítico

La era digital apenas comienza y la única manera de combatir los efectos negativos que tendrá en
nosotros es cambiar la manera en que actuamos.

Gestionar nuestro tiempo en la Internet y en las redes sociales es fundamental en este tiempo. La
democratización de la información es tan importante como la educación digital y nuestros hábitos
de consumo de contenidos.